En créditos rápidos, vamos a hablar del crédito puente. Vuestra familia se agranda u os gustaría acercaros a vuestros hijos por ejemplo, poseéis una propiedad inmobiliaria y deseáis vender para comprar otra.
Dos soluciones se os presentan. O bien esperáis vender vuestra propiedad para disponer del capital y poder así hacer la nueva compra, o bien utilizáis lo que se llaman préstamos puente.
De manera esquemática estos créditos harán un “puente” entre la venta que todavía no se ha realizado y la nueva adquisición. El banco os prestará un avance de fondos que permitirá comprar la nueva vivienda, este avance está hecho respecto a la futura venta de vuestra antigua propiedad.
Estos créditos tienen una duración de 12 a 24 meses. De ahí que se pueda considerar un crédito rápido.
En cuanto la venta de la anterior viviendo se haya realizado y el dinero recibido, podréis reembolsar el crédito puente acordado.
El banco estimará vuestra antigua vivienda y os hará un crédito que representará alrededor de 60-80% del valor inmobiliario puesto en venta. Es de esperar que el banco se guarde un margen de seguridad por si acaso.
En términos de devolución, tenéis elección entre reembolsar únicamente los gastos de seguro o bien reembolsar el seguro más la suma de los intereses, al fin a la expiración de este crédito puente tendréis que devolver el capital prestado.
Muchas veces se cambia de vivienda para uno más grande o más bonito (los casos inversos son más escasos) y el crédito puente no permitirá la compra de la nueva propiedad por lo que es posible hacer un préstamo inmobiliario más convencional en paralelo al crédito puente.
El crédito parece ser una buena solución, no obstante no nos libra de ser prudentes y hay que poder vender su propiedad dentro del placo de 24 meses si no nos podemos enfrentar a mensualidades imprevistas e inoportunas. Convertiría este crédito que debería ser rápido en algo mucho más largo y tedioso.
Y cuando el mercado inmobiliario está mal, no solo se arriesga uno a vender su propiedad en un tiempo mayor que el previsto sino que además posiblemente a un precio inferior al que se esperaba.